Se sabe que el cine mexicano cuenta con un amplio catálogo de obras maestras y clásicos de la época de oro. Géneros como la comedia, el romance y el musical son principalmente por los que nuestro cine es conocido a nivel internacional. Sin embargo, dentro del terror y el suspenso existen grandes obras mexicanas que dejaron huella en el séptimo arte. Ya sea por su atrevimiento, su guion o su destacable dirección, el cine mexicano ha demostrado su versatilidad y capacidad para transmitir tensión, miedo y suspenso sin otra herramienta más que la habilidad para desarrollar atmósferas espeluznantes, cuyo principal monstruo es el miedo acechante de la culpa y la incertidumbre. A continuación, una pequeña lista de algunas cintas de terror para disfrutar durante esta época del año.
Macario (Dir. Roberto Gavaldón) (1960)
Uno de los grandes clásicos del cine mexicano y la primera cinta en ser nominada a mejor película extranjera en los premios de La Academia. Su historia es un retrato fantástico sobre la desigualdad social, la desesperación, el anhelo y la muerte a través de Macario, un hombre que huye al bosque para poder comer un guajolote que su esposa robó para cumplirle su deseo de comer sin compartir con sus hijos, se encuentra con tres figuras misteriosas que le piden compartir con ellos su comida a cambio de un regalo. Siendo estos la representación de Dios, el diablo y la muerte, rechazándolos a todos a excepción de la muerte al considerarla justa.
A pesar de que el final deja muchos debates, la historia se centra en el existencialismo de Macario durante el tiempo que comparte con la muerte, en donde reluce su bondad y sus valores mientras cuestiona e intenta comprender a la muerte por lo que es, logrando finalmente aceptarla.
Hasta el Viento Tiene Miedo (Dir. Carlos Enrique Taboada) (1968)
Dirigida por uno de los mayores referentes del cine de terror mexicano, tenemos este clásico ambientado dentro de un internado para señoritas, en donde el fantasma de una ex alumna aterroriza a las estudiantes y persigue la consciencia de las docentes cuando un día decide atormentar los sueños de una de las alumnas y manifestar su presencia fantasmal para tomar venganza contra la directora del colegio.
Una película que toca temas sobrenaturales, pero al mismo tiempo, refleja el abuso de poder de los docentes hacia los alumnos y la falta de empatía en una institución que antepone la rigidez y la conducta por encima de la estabilidad mental y la libertad. Siendo un relato terrorífico, pero sobre todo triste, sobre el daño que puede causar el miedo y la represión desmedida en los jóvenes.
Alucarda, La Hija de las Tinieblas (Juan López Moctezuma) (1978)
Una de las películas mexicanas de terror más controversiales que se convirtió en una obra de culto. La historia toma lugar en un monasterio cuya tranquilidad se ve amenazada luego de la llegada de Justine, una huérfana que entabla una poderosa amistad de amor y deseo con Alucarda, otra huérfana misteriosa que ha llevado internada en el convento desde su nacimiento. Es entonces que luego de adentrarse en un bosque y descubrir un palacio maldito junto a un gitano extraño, se despierta una maldición en Alucarda, que comienza a surtir efecto en Justine con la aparición de Lucifer, quien finalmente las posee y desata una serie de desgracias demoníacas en su nombre que pone en peligro a todos en el convento.
Esta cinta basada en la novela corta de 1872 “Carmilla” de Sheridan Le Fanu ha logrado pasar como clásico de culto por su planteamiento arriesgado y sus tomas visuales que hasta el día de hoy siguen siendo referentes del cine de terror mexicano.
Veneno Para Las Hadas (Dir. Carlos Enrique Taboada) (1986)
Nuevamente una producción del cineasta y maestro del terror del cine mexicano Carlos Enrique Taboada. En esta ocasión la historia se desarrolla siguiendo a dos niñas de ideas y realidades opuestas, Verónica, una huérfana fantasiosa y solitaria que pasa su día en cuidado de su abuela, y Flavia, una niña centrada y realista de familia adinerada y padres amorosos que conoce y se hace amiga de la imaginativa y manipuladora Verónica, quien le asegura que es una bruja de verdad. Es ahí cuando comienza una serie de reuniones, secretos y pruebas en las que Verónica, a base de trucos y casualidades, convence y adentra a Flavia en su mundo de fantasía en el que desarrolla control sobre ella hasta poner en riesgo sus propias vidas.
La historia nos sumerge en la imaginación y duelo con la realidad que va desvaneciéndose hasta el punto de mezclarse en una distorsión que recae en la estabilidad mental de la protagonista. Creando un thriller psicológico bien desarrollado guiado por la imaginación.
Más Negro Que La Noche (Dir. Carlos Enrique Taboada) (1975)
Una joven es reconocida como heredera de la propiedad de su tía tras su muerte con el único favor de que cuide de su amado gato. La joven, junto a sus amigas, se instalan en la casa en donde aún se encuentra la misteriosa y leal sirvienta de su tía fallecida, quien a primera vista obtiene una mala impresión de las despreocupadas y cínicas amigas de su sobrina, las cuales demuestran una actitud hostil hacia la sirvienta y el gato, hasta que unas apariciones y accidentes sobrenaturales dentro de la casa comienzan a perseguirlas, despertando miedo y remordimiento a través de una presencia fantasmal.
Un relato sobre vergüenza y culpa expresado a través de una historia de terror y misterio con la esencia y encanto característico de Taboada, con referencias al cine giallo de Dario Argento y el suspenso clásico de Hitchcock que reúne a nombres reconocidos del cine mexicano en plena década de los 70’s.
La Tía Alejandra (Dir. Arturo Ripstein) (1980)
Ripstein demuestra como siempre su capacidad de crear atmósferas de tensión y suspenso desarrolladas con la agilidad y naturalidad precisa para transmitir incomodidad e inquietud genuina en la audiencia.
La historia se desarrolla dentro del hogar de una familia compuesta por una pareja y sus tres hijos, quienes reciben la visita de su misteriosa tía, una anciana aparentemente amable que les ofrece ayuda económica a cambio de alojo. Sin embargo, su presencia comienza a provocar rechazo e inquietud en los niños, quienes perciben sus malas intenciones a excepción de la más pequeña. La anciana al tratarse de una bruja encarnada en el cuerpo de la tía comienza a vengarse de los desplantes y travesuras de los niños creando un ambiente maldito en la casa y dando origen a una serie de tragedias demoniacas contra la familia.
Una atrapante y perturbadora cinta desarrollada en una sola locación con una destacable dirección y maravillosas actuaciones que la convierten en una de las mejores películas mexicanas del género.
El Libro de Piedra (Dir. Carlos Enrique Taboada) (1969)
Al igual que en “Veneno Para Las Hadas”, Taboada vuelve a recurrir a la extraordinaria mente de los niños como herramienta clave para el terror de esta historia. Al ser los infantes y los animales los seres más sensibles ante actividades paranormales debido a su intuición y perspicacia, su mediación ante lo sobrenatural se convierte en el punto clave para desarrollar el suspenso y el miedo en este relato de manera natural y aterradoramente sutil.
La historia gira en torno a la peculiar amistad entre Silvia, una niña quien su padre considera trastornada y su amigo fantasma, Hugo, una estatua de piedra de más de 100 años. Con la llegada de su nueva institutriz, una mujer comprensible y amable, su padre y su nueva esposa le advierten del estado de su hija y sus espeluznantes fantasías desde la llegada a su nueva residencia. Poco a poco, la extraña amistad entre Silvia y Hugo comienza a tornarse peligrosa, convirtiéndose en una amenaza que lleva a los adultos escépticos a considerar la existencia de la magia negra y los fantasmas en su intento de salvar a la familia de esta maligna presencia.
La Llorona (Dir. René Cardona) (1960)
Don Gerardo, un hombre temeroso de que la maldición de su familia recaiga en su hija recién casada, le cuenta a su yerno sobre la historia de La Llorona, una mujer de padre español y madre india que al ser traicionada y abandonada con sus dos hijos por un conquistador español que resulta ser antepasado de la familia de Don Gerardo, decide vengarse maldiciendo a su linaje para siempre con la muerte de todos los primogénitos de sus descendientes antes de cumplir los 5 años de edad. Dando origen a la leyenda del espeluznante lamento fantasmal nombrado como “La Llorona” en el que se puede escuchar a la mujer de la historia llorando por haber asesinado a sus propios hijos en una crisis de locura tras ser abandonada y rechazada junto a sus hijos por ser mestizos.
La historia de la leyenda más famosa de México cuyo trasfondo además del miedo, transmite tristeza y empatía por el desdichado y cruel final de la mujer detrás de la leyenda. Mezclando el terror con la fantasía en un relato tanto aterrador como conmovedor.
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