Guillermo del Toro, el aclamado director mexicano de cine, tiene un espectacular santuario como casa en Los Ángeles, California, que utiliza para explotar toda su creatividad, y lo convirtió en su espacio predilecto para escribir los guiones de sus películas.
El cineasta mexicano, originario de Guadalajara, Jalisco, es conocido a nivel mundial por filmes como El laberinto del fauno, Hellboy, La cumbre escarlata y La forma del agua, por la cual obtuvo el Globo de Oro y el Óscar como mejor director. La carrera del mexicano no se ha ceñido únicamente al cine, sino que también ha incursionado en el ámbito de la literatura, ya que tiene una trilogía de novelas que escribió junto a Chuck Hogan. Además, fue director de la serie mexicana de los ochenta La hora marcada, así como co-creador de la serie estadounidense The Strain.
La espectacular residencia del cineasta alberga más de 700 piezas de colección, así como 9,000 libros y más de 50,000 revistas y cómics. En esta impresionante mansión convergen artículos de fantasía, horror y ciencia que han inspirado a del Toro para la realización de sus cintas. El mexicano se inspiró en la biblioteca de Walt Disney para la creación de su propio santuario literario, y es tal su encanto por Disney que tiene bocetos originales de La bella durmiente y Fantasía.
Bleak House (casa desolada) como la llama el cineasta en honor a un libro de Charles Dickens, nos muestra la fascinación del mexicano por Frankenstein y por los novelistas de terror H. P. Lovecraft y Edgar Allan Poe, de quienes tiene estatuas de tamaño natural. También atesora objetos relacionados con Alfred Hitchcock, el famoso director de suspenso. Aunado a esto, es posible apreciar objetos de utilería de sus propias películas como Cronos, Blade II y Hellboy.
Del Toro tiene también una obsesión con los esqueletos y calaveras y en su colección alberga más de 100, los cuales en su mayoría son falsos, ya que repudia todo lo que tiene que ver con violencia en la vida real. Además, sobresale la fascinación del director por los personajes de la cinta Freaks de 1932.
Cabe mencionar que del Toro y su familia no viven en esta casa, ya que a su esposa e hijas les parece espeluznante, por lo que viven en una residencia cercana y el cineasta utiliza Bleak House como un refugio para el proceso creativo de sus múltiples proyectos.
En 2018, durante los terribles incendios forestales que azotaron California, la casa del cineasta estuvo en riesgo, pero afortunadamente no sufrió ningún daño.
Las piezas de esta casa museo se han exhibido en diversos recintos como Los Angeles County Museum of Art (LACMA) y más recientemente en el Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara, donde fue la última ocasión que sería exhibida esta colección fuera de Bleak House.
Con información de The New York Times y SinEmbargo.
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