Ron Mueck es un escultor australiano del movimiento hiperrealista. Nació en Melbourne, Australia, en 1958, y es hijo de jugueteros, por lo que desde pequeño convivió con técnicas asociadas a dar vida a objetos inertes. Desde niño dedicó su tiempo al modelado de figuras, vocación que luego desarrollaría dentro la industria del cine, la televisión y la publicidad.
Con sus obras de proporciones poco convencionales, Ron Mueck busca recrear la magnitud de las emociones con relación al cuerpo, resaltando los más minuciosos detalles, desde la pigmentación de la piel, hasta las expresiones faciales, que crean un vínculo profundo entre los espectadores y sus esculturas. El hiperrealismo se caracteriza por recrear de manera casi perfecta los detalles del cuerpo humano, y Mueck lo lleva a niveles inimaginables.
Una de sus creaciones más controvertidas es “Papá muerto”, una escalofriante e hiperrealista obra de silicón y otros materiales, inspirada en el cuerpo muerto de su padre, reducido aproximadamente a dos tercios del tamaño natural. En esta obra, Mueck utilizó el propio pelo de su padre para realizar los detalles de la escultura.
A partir de 2001, Mueck comenzó a tener gran aceptación internacional y se destaca desde ese momento como uno de los artistas más originales y controversiales del arte contemporáneo. Gracias a su impresionante técnica, Mueck es capaz de imprimir vida a sus creaciones y desafía los límites de la realidad y la ficción.
En 2011, llegó al Antiguo Colegio de San Ildefonso de la Ciudad de México la exposición de Ron Mueck “Hiperrealismo de Alto Impacto”, la cual cautivó al público mexicano, quienes abarrotaron durante varios meses la exhibición. Previamente se había presentado en el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey.
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